MANUEL PARRA, de la exposición CONTRA-NATURA
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Ladrillos capilares.
Esta serie de obras es una exploración de la relación filial madre-hijo, utilizando elementos inusuales como el ladrillo y el cabello. El ladrillo, como elemento sólido y edificante, representa la fuerza y la solidez, mientras que el cabello, como elemento natural y frágil, representa la vulnerabilidad y la intimidad.

El artista combina estos elementos de manera simbólica para crear una metáfora de la relación entre la madre y el hijo. El cabello utilizado en la serie pertenece a la madre del artista, y se convierte en parte de la obra, creando una simbiosis entre el ladrillo y la madre, donde ella es su hogar y él es parte de ella.

Manuel Parra nos invita a comprender el amor filial más allá de la idealización artificial que a menudo lo rodea. La obra nos muestra la complejidad de las relaciones humanas y cómo lo natural y lo artificial pueden fusionarse para crear algo nuevo y poderoso. Y la importancia de aceptar lo natural y lo artificial en nuestra vida cotidiana.